Cuando vamos al supermercado, lo primero que llama nuestra atención son los pasillos llenos de productos con envases de colores y nombres de marcas fáciles de recordar.
Los colores y los nombres de esos envases no tienen nada malo por sí mismos. Sin embargo, los sabores de los productos que contienen están diseñados al milímetro para engancharnos, para que consumamos ese producto una y otra vez, y todo a expensas de nuestra salud.
Estos productos son los conocidos como alimentos ultraprocesados, productos que, en realidad, poco o nada tienen de alimentos. Lo que sí tienen, en cambio, es un nivel altísimo de azúcares, edulcorantes, colorantes, texturizantes y potenciadores de sabor, ingredientes industriales nocivos para el organismo.
Por esa razón, queríamos hacer un pequeño paréntesis en nuestro blog de recetas italianas para hablar de los alimentos ultraprocesados y sus consecuencias, uno de los problemas de salud que más crecen en la sociedad moderna.
¿Qué significa que un alimento sea ultraprocesado?
La clasificación NOVA de los alimentos los divide según los procesos físicos, químicos y biológicos que sufren una vez separados de la naturaleza y antes de ser consumidos. Esta categoría incluye productos alimenticios y bebidas que resultan de formulaciones industriales obtenidas con cinco o más ingredientes (alimentos ultraprocesados).
Pues bien, los alimentos ultraprocesados se consiguen mediante varios procesos previos que provocan la pérdida de calidad nutricional de los ingredientes de base: hidrólisis de proteínas, fritura de aceites, refinación de harinas, etc.
Además, están saturados de aditivos cuya función es, bien imitar las cualidades sensoriales de los alimentos no procesados (sabor, olor, etc.), bien ocultar las cualidades indeseables del producto final. Así, se caracterizan por sus altos niveles de azúcares, sales, grasas saturadas, harinas refinadas y otras sustancias con un aporte nutritivo prácticamente nulo.
Por poner un ejemplo, ¿sabías que la cantidad de azúcar de la Coca-Cola es suficiente para hacer vomitar a un adulto? ¡Por no hablar de un niño!
Si te has fijado alguna vez en los ingredientes del famoso refresco (y, si no lo has hecho, te invitamos a hacerlo), verás que uno de ellos es el ácido fosfórico (E-338): este ingrediente se usa para evitar el vómito que nos causaría la enorme cantidad de azúcar que ingerimos al tomar una simple Coca-Cola.
Los aditivos de los alimentos ultraprocesados
Como hemos dicho antes, los aditivos son "la estrella" de los alimentos ultraprocesados, pues sirven para hacer el producto sensorialmente atractivo a pesar de su poca o nula calidad nutricional.
Estos aditivos se clasifican en varios grupos, y los principales son los siguientes:
Colorantes
Los colorantes, como su nombre indica, se emplean para dar color a los alimentos procesados y ultraprocesados. De los más usados son los colorantes rojos y amarillos, sospechosos de provocar alergias y alteraciones de comportamiento en los niños.
Conservantes
Uno de los conservantes más antiguos que se conocen es la sal, pero consumida en exceso puede provocar problemas como la hipertensión, insuficiencia renal y osteoporosis. Sin embargo, también existen otros conservantes como el sorbato de potasio y el benzoato de sodio, que también se clasifican dentro del grupo de las sales.
Aromatizantes
Se emplean para dar aroma a los alimentos, además de sabor. Son de los aditivos más usados en la industria agroalimentaria, y existen cientos de ellos.
Edulcorantes
Estos aditivos se usan para endulzar los alimentos, haciéndolos así más atractivos al gusto. El edulcorante industrial por antonomasia es el azúcar blanco, cuyo consumo en exceso provoca diabetes de tipo 2, obesidad y problemas cardiovasculares graves.
Existen otros edulcorantes que no aportan calorías al alimento, como el acesulfamo de potasio y el aspartamo, el edulcorante usado en los refrescos "light". Sin embargo, no por no tener apenas calorías su consumo en exceso es inocuo para el organismo.
Potenciadores de sabor
Los potenciadores de sabor son un tipo de aditivo alimenticio usado para aumentar el sabor de los productos. Es otra forma de hacerlos sensorialmente más atractivos para el consumidor.
Uno de los más conocidos es el glutamato, un aminoácido no esencial presente de forma natural en muchos alimentos, sobre todo en los que más proteínas contienen, como la carne, el pescado y los lácteos.
Emulsionantes
Los emulsionantes se emplean en la industria agroalimentaria para mejorar la textura y la estabilidad del producto. El más usado es la lecitina de soja, que también cumple otras funciones.
Relación entre alimentos ultraprocesados y ciertas enfermedades
Una de las principales consecuencias del consumo de alimentos procesados (sobre todo unido a la vida sedentaria) es la aparición de sobrepeso y obesidad. Estos problemas conllevan, a su vez, otras complicaciones de salud.
Por ejemplo, está más que demostrada la relación entre el consumo excesivo de azúcar y la aparición de diabetes de tipo 2. Los alimentos ultraprocesados también suelen aumentar el nivel de colesterol y la presión arterial, y esto, a su vez, puede provocar problemas cardiovasculares (infarto de miocardio, etc.).
Por último, también se sospecha de la relación que puede haber entre los alimentos procesados y ultraprocesados con la aparición de ciertos trastornos psicológicos y de comportamiento, sobre todo entre la población más joven.
Cómo detectar los alimentos ultraprocesados
La primera "pista" que podríamos seguir para detectar este tipo de alimentos perjudiciales es, como dijimos al principio de este post, los envases: cuidado con los colores chillones y las imágenes atractivas, un reclamo visual muy potente especialmente para los niños y los adolescentes.
Sin embargo, por romper una lanza a favor del equipo de marketing de esa marca, la manera fehaciente de comprobar que efectivamente se trata de un producto ultraprocesado es consultar sus ingredientes.
Por norma general, estos productos contienen más de 5 ingredientes, y siempre habrá algunos que nunca tengamos en casa, precisamente, porque solo se obtienen mediante procesos industriales. Fíjate, además de en los aditivos, en la cantidad de azúcares, sales y grasas saturadas.
A modo de ejemplo, los alimentos que en su mayoría son ultraprocesados son los siguientes:
- Refrescos de todo tipo y muchos zumos de frutas
- Bollería industrial
- Snacks
- Salsas
- Cereales, sobre todo los que tienen mucho azúcar añadido
- Lácteos listos para consumir (yogures de frutas...)
- Carnes y pescados listos para consumir
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